Emprender se ha convertido en la mejor salida para miles de trabajadores. Los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA) revelan, aún, una tasa de desempleo superior al 20%, lo que está haciendo proliferar el fenómeno del autoempleo. Las claves del éxito residen en hacer lo que a uno le gusta, no olvidar la estrategia de marketing de contenidos y no tener miedo al fracaso, entre otros factores. A continuación, se propone un breve repaso a 10 consejos a tener presentes cuando se comienza una nueva aventura empresarial.
[Tweet «Conocer al público objetivo y saber conectar con él es garantía de éxito.»]
1. Disfrutar con el trabajo
Nada hay más gratificante que disfrutar con la actividad que se realiza. Apostar por hacer lo que a uno le gusta es la mejor garantía de éxito.
2. No temer al hecho de fracasar
El miedo es el peor enemigo para todo, también a la hora de emprender. Coraje, siempre, pero planificando los presupuestos.
3. Ser realista
Los datos son muy importantes. Analizar el estado del negocio en base a una realidad numérica ayuda a tener los pies en la tierra y no perderse en elucubraciones sin fundamento que solo conducen a planificaciones erróneas.
4. Tener en cuenta el marketing de contenidos
Comprar contenido para blog y redes sociales a redactores freelance especializados en la disciplina de la actividad es muy aconsejable. Abrir canales de comunicación en Internet es un gran paso para atraer tráfico de calidad, generar leads y mejorar las conversiones. El branded content ayuda a definir la identidad corporativa.
5. Buscar asesoramiento
Rodearse de un equipo multidisciplinar y con profundos conocimientos del sector de actividad es un must para adquirir la mejor consultoría.
6. No ponerse topes
Sin perder el contacto con la realidad, pero siempre con una visión de crecimiento. Así debe ser el espíritu emprendedor. Internet, además, es un canal perfecto para internacionalizarse y llegar hasta el rincón más recóndito del mundo.
7. Conocer a la competencia
No hay que olvidar que hay que vigilar de cerca a las empresas que se dedican a vender productos o servicios parecidos. Un análisis o benchmarking regular ayuda a buscar un factor diferencial y poder proporcionar valor añadido.
8. Especialización en un nicho de mercado
La concreción es un valor añadido. Tener delimitado perfectamente a quién se vende, conocer al público objetivo y saber conectar con él es una garantía de éxito.
9. El networking, fundamental
Ampliar la red de contactos es un must para no perder oportunidades de negocio. Hay que conocer al dedillo el producto o servicio que se vende; ser un apasiono de él y saber venderlo y comunicarlo con acierto.
10. Productividad al máximo
Optimizar los recursos radica, entre otros factores, en ser productivo. No hay nada mejor que aprovechar el tiempo de trabajo y darlo de sí a tope. Dominar los aspectos tecnológicos y reciclarse constantemente son pautas excelentes para no quedarse atrás.