Todas las marcas que se adentran en el mundo del marketing de contenidos como herramienta SEO temen cometer errores. Al principio, es habitual que se tema publicar en las redes sociales ya que, al quedar al «descubierto» frente a sus públicos y ser estos activos comentaristas, cualquier error o equivocación en la gestión de los contenidos puede tener consecuencias negativas en la imagen de la empresa.
No obstante, las ventajas de usar las redes sociales como canales de comunicación con los usuarios o clientes son mucho más numerosas. Las crisis de reputación online son fácilmente superables si se está preparado y se siguen estos consejos:
– Tanto el redactor freelance como el encargado de comprar contenido y de crear la estrategia de contenido para blog y redes sociales, debe vigilar siempre los comentarios de los usuarios y responder con la mayor rapidez posible, ofreciendo siempre una respuesta.
– Hay que tener en cuenta que todos erramos y, por ello, a veces una solución básica es simplemente pedir disculpas con humildad. El número de reacciones indicará la gravedad de nuestro error, pero siempre es esta una buena opción, señal de transparencia y humanidad por parte de la empresa.
– Se recomienda no borrar los comentarios negativos, ya que borrarlos no significa que desaparezcan estas opiniones.
– Se debe evitar la agresividad, incluso cuando el comentario recibido haya sido agresivo, ya que uno de los valores más importantes de una marca en Internet es el respeto. En casos extremos, es mejor hacer uso de las funciones de denuncia que las redes sociales ofrecen.
– La mejor solución es ser previsor y tener a mano una guía para saber cómo actuar en estos casos.
Las redes sociales permiten a las empresas conversar con sus clientes y ganarse su confianza. Pero, como en toda relación, hay momentos de crisis y de estas se puede salir fortalecido.