¿Estás preparado para ser un emprendedor de marketing de contenidos?

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Emprender se trata de creer en uno mismo cuando nadie más lo hace. Se trata de una empresa difícil de llevar a cabo y, aunque, últimamente, esté de moda, no todo el mundo vale para ello. Las alternativas que ofrece el mercado laboral son pocas y uno o emigra o emprende. La realidad es que no es tan fácil iniciar un negocio. 

Hay que tener espíritu y unas características determinadas, ya que no todo el mundo está preparado. Aunque uno se dedique al marketing de contenidos y piense que, con una página web o tienda online es suficiente, no debe equivocarse.

En este artículo, vamos a dar las pautas necesarias para saber si uno está preparado para ser un emprendedor del marketing de contenidos

Lo primero que hay que tener son ideas claras y es preciso saber que va a ser una carrera de obstáculos en la que gana el que más resiste e insistir hasta conseguir los objetivos. Hay que tomar una actitud responsable y las riendas, además de planificar con anticipación todos los movimientos.

Una cosa importante antes de emprender: menos del 10 % de las empresas recién fundadas llegan a los dos años de duración

Por tanto, es necesario conocer dónde se mete uno. No se trata de desilusionarse. Se trata de prepararse. Cuanto más se sabe acerca de las dificultades a las que uno se va a enfrentar, más posible es superarlas. A continuación, vamos a citar algunos de los mayores miedos a los que se enfrentan por ejemplo, los redactores freelance o gente que se dedica al branded content:

No tengo dinero para emprender

Este es un mal momento económico en el país

Estoy más cómodo en la empresa privada

No poseo conocimientos legales ni administrativos

Es demasiado tarde para emprender

Tengo cargas familiares, hipoteca y coche, por lo que no me puedo arriesgar

Si, a pesar de los anteriores temores, uno está decidido a seguir adelante, enhorabuena: hay espíritu emprendedor. Hay que organizarse bien y hacer un plan a largo plazo de lo que se quiere hacer.

Hay que generar una idea de negocio. Por ejemplo, si uno es redactor especializado, debe pensar si quiere crear una empresa para crear contenido para blog o montar la suya propia. O todo lo contrario: hay empresas que se dedican a comprar contenido. Cabe la posibilidad de plantearse trabajar de intermediario para esas empresas.

Hay que hacer una biografía con los conocimientos y enumerar las fortalezas y debilidades. ¿Se quiere montar una tienda online o un blog? Darse a conocer, usar las redes sociales, anunciarse. Vale la pena realizar cursos online y no tener miedo de aprender cosas nuevas. Hay que pensar que es la aventura de la vida de uno: lo mejor es trabajar en lo que a uno le gusta.
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