Cualquier redactor freelance que se dedique al marketing de contenidos o a generar contenido para blog como herramienta SEO tiene claro que las marcas han cambiado su relación con los clientes. Las marcas se están humanizando, se acercan al consumidor a través de las redes sociales y pretenden ante todo mejorar la reputación online de la empresa en Internet, para lo cual pueden comprar contenido.
Esta transformación de las marcas se observa, por ejemplo, en las denominadas»marcas azules«, aquellas que no solo son medioambientalmente sostenibles sino que, además, tienen un impacto positivo en su entorno social y económico. Se trata de que la marca esté en sintonía con los valores del target de clientes al que se dirige.
Ejemplo de marca azul es la empresa P&G y su producto Downy, que ahorra un alto porcentaje de agua en el proceso de lavado de prendas en la lavadora. ¿Qué ha conseguido con su producto? Ahorrar agua, lo cual es medioambientalmente loable, y ahorra dinero al ama de casa. Ha logrado, pues, un impacto positivo en el medio ambiente y en la economía, siendo además un producto socialmente aceptable. Eso es lo que persiguen las marcas azules.
Tras las marcas azules se encuentra la apuesta de la empresa por la responsabilidad social corporativa. Los productos sostenibles desde el punto de vista ambiental, económico y social son muy bien valorados en las redes sociales y ello conlleva una mejora de su reputación online. Hoy en día, tanto vale una empresa como vale la marca que la representa, sobre todo, teniendo en cuenta el tremendo impacto de las redes sociales en el mundo en el que vivimos.
Las marcas azules son pues una manera de conectar con los clientes potenciales, cada vez más preocupados por el proceso de producción de los productos que consumen y los valores asociados a las marcas.