Redactar contenidos SEO no es difícil, pero hay que tener en cuenta una serie de puntos clave de utilidad para poder obtener los mejores resultados posibles.
[Tweet «Los #buscadores ya analizan la calidad de los contenidos.»]
Claves para un buen posicionamiento SEO de los contenidos
– Originalidad y creatividad: son las bases de todo contenido SEO. Tras recopilar información de las fuentes correspondientes, se debe redactar un contenido original reescribéndolo todo de nuevo y de la forma más creativa posible. El típico “copiar y pegar” no solo es una incorrección, sino que, además, está penalizado por los buscadores.
– Saber a quién va dirigido el contenido: conocer el tipo de público al que se dirigen los artículos ayudará a escribirlos adecuadamente y en concordancia con las personas que lo van a leer. Porque no es lo mismo un blog de modas para adolescentes que uno de marketing para directivos. Esto evitará la tasa de rebote, algo que también es medido por los buscadores.
– Crear contenido relevante: cuanto más interés tenga un artículo, más valorado será por los usuarios. También por parte de los buscadores, los cuales ya empiezan a ser capaces de analizar la calidad de los contenidos.
– Artículos de la longitud adecuada: aunque deben ser ricos y ofrecer al usuario toda la información necesaria respecto al tema tratado, extenderse en exceso mediante palabras vacías por no dar el tema para más es perjudicial para el posicionamiento en buscadores.
– Incluir las palabras clave adecuadas: todo texto debe tener insertadas laskeywords relacionadas con su temática, lo más al principio posible. Deben sercolocadas de forma natural y evitando errores sintácticos. Tampoco hay que abusar de ellas repitiéndolas en exceso, pues los buscadores lo podrían considerarkeyword stuffing.
– Usar sinónimos y variaciones morfológicas: para evitar excederse en el uso de las palabras clave, puede hacerse uso de estas variantes, ya que los buscadores están cada vez más preparados para interpretarlas y valorar el contexto que definen.
– Vigilar la ortografía: además de resultar desagradable, los buscadores también perciben que un contenido tiene errores ortográficos o gramaticales. Así que hay que revisar bien los textos antes de su publicación.
– Uso de links y negritas: es importante resaltar con negritas la información clave de un artículo, así como enlazar a otras páginas que puedan tener interés para el usuario. Además, es algo que también perciben los buscadores y puede mejorar el posicionamiento web.
– No obsesionarse con el SEO: es posible encontrar alguna agencia SEO que, en su interés por la optimización de los contenidos para los buscadores, los convierte en ilegibles para el usuario. Los artículos se publican para ser leídos por el lector, así que, en caso de duda a la hora de redactar, hay que tener en mente al usuario.
Una vez vistas estas claves, se hace evidente que la redacción SEO no es realmente difícil.