Marketing de contenidos: el arte de contar historias

marketing de contenidos

Compartir

El tiempo es un bien preciado cada vez más escaso. ¿Qué puede hacer una empresa para impactar en pocos minutos? La mejor forma de que sea conocida y recordada es con una buena historia. Ahí radica el éxito del marketing de contenidos. Por lo tanto, a la hora de crear contenido para un blog es fundamental encontrar una historia que conecte con los sentimientos y valores del cliente.

Hay que empatizar con el cliente y ofrecerle el producto como la solución

Si además ofrece una solución a las necesidades del usuario, la lealtad a la marca estará asegurada. Este recurso, conocido como storytelling, es una de las tácticas más frecuentes de los redactores freelance.

El arte de contar historias no es vender un producto, sino experiencias y soluciones. Y hacerlo mediante contenidos con una perspectiva más emocional que comercial, que hablan de amor, superación y solidaridad. Pero, ¿cómo destacar entre tantos mensajes?

Una técnica es presentar la historia a partir de un conflicto que afecta al personaje. En este caso, el cliente. De ahí la importancia de empatizar con él y ofrecerle el producto como la solución para alcanzar sus metas. Sin esta historia detrás, la marca será un catálogo más en la Red.

Debido a su alto conocimiento en herramientas SEO, una opción rentable es comprar contenido de calidad a redactores freelance. Son expertos en encontrar temas que responden a las principales búsquedas orgánicas, nutrir el contenido con enlaces de calidad y crear sentimientos mediante el uso de palabras clave. Pero no solo eso, saben contar temas universales que llegan al corazón, que son creíbles y que aportan una solución. Solo así, la empresa conseguirá atraer, empatizar, vincular y fidelizar al cliente sin necesidad de una segunda oportunidad.

De confirmarse todas las previsiones, el marketing de contenidos será tendencia en 2015. Se acabó la era de vender o informar en primera persona. Es el tiempo de contar, conmover, ayudar y ponerse en la piel del client

Imagen.