En la era del nuevo marketing digital 3.0 hay un concepto a tener muy en cuenta y que está cobrando mucho valor: el engagement. Las empresas ya no solo buscan vender sus productos, sino que pretenden generar un vínculo emocional con los clientes.
Todas las marcas buscan destacar por encima del resto y que los usuarios las elijan en base a su personalidad, los valores que transmitan y por ser una referencia en su sector. Si queremos atraer nuevos clientes y fidelizar los que ya tenemos, el concepto de engagement sería la mejor herramienta de nuestro almacén.
¿Qué es el engagement exactamente?
Estamos hablando mucho de este término, pero ¿qué es exactamente? Podríamos entenderlo como una clase de vínculo emocional que un cliente o usuario contrae con una marca determinada.
Esta técnica es muy utilizada por los departamentos de marketing de las empresas para llegar a los usuarios y convertirlos en clientes. Así que no nos extrañemos si vemos cada vez más anuncios en los que no se vende ningún producto, donde no se ensalzan las propiedades de determinado objeto o servicio, pero en los que sí podemos percibir un estilo de vida concreto, una sensación de simpatía hacia el anuncio o algunos valores agradables.
Lo que se pretende es despertar determinadas sensaciones en el usuario. Con esto queremos conseguir que el cliente potencial piense que le cae bien la marca, que le gusta lo que transmite y que quiere utilizarla para expresar que también comparte el mismo estilo de vida.
Para poder implementar este concepto dentro de la estrategia de marketing de nuestra empresa, prestemos especial atención a sus contenidos. Los argumentos que utilicemos deben ser de calidad y la imagen de nuestra marca tiene que ser exquisita.
El engagement y el branding van de la mano
Con una buena imagen establecemos las bases para que el cliente se identifique con nuestra marca. Así que la creación de una estrategia enfocada a este tema resulta imprescindible.
Dentro de la imagen de marca, es necesario cuidar tanto la parte visual como el contenido escrito. Del mismo modo, también necesitamos prestar atención a las opiniones que los usuarios tienen sobre nosotros y cómo nos perciben cuando buscan referencias de nuestro negocio.
Para ello contamos con la gran ayuda de las redes sociales, ya que generan tanto imagen de marca como engagement. Gracias a ellas, cualquier empresa puede interactuar de manera fácil y rápida con sus usuarios. Además, resulta relativamente sencillo medir la respuesta de nuestras campañas, por lo que podemos ir adaptándolas para conseguir nuestros objetivos.
Este nuevo tipo de marketing se centra en el cliente. Por lo tanto, la experiencia del usuario debe ser siempre satisfactoria, sobretodo si queremos que se implique y nos recomiende.
Contamos con diferentes estrategias con resultados notables y muy válidos. Si conseguimos seducir al usuario con nuestra marca y que quede «enganchado», será él mismo quien nos recomiende y promocione de manera gratuita y eficaz. Recuerda que el «boca a boca» de toda la vida es lo que mejor ha funcionado siempre.
Las opiniones de los usuarios son muy importantes, puesto que queremos que alguien desconocido se decida por nuestra empresa y no por otra. Cuantos más embajadores tengamos de nuestra marca, la ventaja sobre la competencia será mayor.
¿Cómo conseguir conectar con el cliente?
Lo primero es reflexionar sobre lo que nos gustaría que otros pensasen sobre nuestro negocio. ¿Qué queremos que digan de nosotros cuando salimos de la habitación?
Hay que empatizar con los usuarios, ponernos en su lugar y entender lo que esperan de nosotros. De esta manera, seremos capaces de ofrecer una respuesta efectiva para poder captarlos.
Empoderar al usuario es una buena manera de hacerle participar y que se sienta tan escuchado como valorado. El efecto de permitir que un usuario se involucre es un refuerzo positivo, y muy útil a la hora de generar confianza y afiliación.
El contacto con los usuarios resulta muy importante. No solo se trata de resolver de manera rápida y efectiva las preguntas o requerimientos que nos hagan, sino de estar atentos a los comentarios que efectúen sobre nosotros y saber utilizarlos en nuestro beneficio.
Pero también los pequeños detalles con los clientes son muy importantes. Cuídalos para que se sientan valorados. Puedes felicitar el cumpleaños e incluir un pequeño detalle como un descuento, un regalo o algo exclusivo. O desear buen viaje y que se cuide cuando se va de vacaciones. Tal vez, interesarse por si le gusta el producto que ha comprado y le ofrece soluciones a lo que estaba buscando. Hay muchos ejemplos.
Todos estos pequeños detalles son los que pueden marcar la diferencia para que un usuario nos elija. En nuestra plataforma encontrarás todas estas estrategias para que las apliques en tu negocio. Como los efectos no son cosa de un día, cuéntanos si los resultados son los que estabas esperando. Cuida a tus clientes y tendrás el éxito asegurado.