Beethoven, Einstein, Picasso… Todos son grandes genios de la historia, con una marcada personalidad y un estilo propio genuino. Indudablemente, las mentes privilegiadas tienen un talento natural pero, al mismo tiempo, reúnen una serie de características muy recomendables en el mundo del marketing, especialmente para los redactores freelance, cuya capacidad creativa es esencial para elaborar contenido para blog y otras plataformas digitales.
A veces innovar consiste en hacer las cosas más sencillas a base de constancia y reflexión.
En primer lugar, los grandes genios son curiosos e impulsivos, pero fundamentalmente se caracterizan por su determinación. Como sienten verdadera pasión por su trabajo, su deseo de alcanzar sus objetivos no conoce límites. De hecho, los creadores más destacados suelen ser aquellos que más horas invierten en su especialidad y dedican su vida entera a seguir aprendiendo y evolucionando.
En ocasiones se cree que la innovación consiste en tener una gran cantidad de ideas. No obstante, a veces innovar consiste en hacer las cosas más sencillas. Por ejemplo, Picasso creía que para ser creativo no era tan necesario buscar ideas nuevas como probar y experimentar, ya que durante ese proceso era cuando llegaba la verdadera inspiración. El patrón de trabajo común para todos estos genios se basa en el ensayo y error, generando así una retroalimentación constante.
Si los redactores freelance, apasionados de la escritura, el marketing de contenidos y las herramientas SEO, quieren elaborar contenidos de calidad verdaderamente efectivos deben seguir el ejemplo de los grandes artistas y pensadores. Para potenciar su creatividad e imaginación, pueden fijarse en alguno de estos genios en concreto como referente y fuente de inspiración. Luego las empresas podrán comprar el contenido que ellos producen, fruto del esfuerzo y la innovación.
Pero no hay que olvidar que los grandes creadores generan una gran cantidad de ideas hasta dar con la adecuada. Por tanto, no solo la constancia, sino también la reflexión deben ser prácticas habituales para lograr la excelencia en cualquier área de especialización.