Textos escritos con IA: ¿por qué es fundamental la revisión humana?

redacción contenidos con Inteligencia Artificial

Compartir

Los textos escritos con Inteligencia Artificial son una realidad. Como ya es de público conocimiento, existen en el mercado distintas herramientas que permiten generar textos con IA en poco tiempo a partir de una temática y unas pautas específicas. Para ello, la inteligencia artificial dispone de grandes bases de datos de información que extrae de distintas fuentes y luego procesa e incorpora a sus modelos de lenguaje; esto le permite redactar textos que cumplen con todos los criterios marcados. Ahora bien, ¿son estas herramientas capaces de generar contenidos 100 % eficaces por sí solos?

¿Tiene en cuenta la IA los requisitos SEO en la creación de contenidos?

La Inteligencia Artificial es una tecnología innovadora, inmersa en una carrera vertiginosa y muy competitiva en busca de la mejor redacción de contenidos posible. De hecho, hoy ya es posible utilizar textos creados con un generador de textos IA como herramientas de comunicación empresarial: las empresas han incorporado la IA a algunos de sus procesos, donde la automatización es un valor añadido y la IA una ayuda para resolver problemas. El ecosistema de plataformas para la generación de textos con inteligencia artificial está creciendo, sobre todo en el ámbito de la generación de textos; hay muchas con más o menos las mismas funcionalidades, pero todas con la capacidad de elaborar textos de calidad aceptable en muy poco tiempo. Pero la cuestión clave es hasta qué punto se trata de textos fiables por sí solos. Tenemos que fijarnos en dos grandes aspectos:
  • Cuál es la calidad real, objetiva, de esas redacciones, de cara al lector final.
  • Cómo responden Google y el resto de los buscadores ante ellos, de cara al SEO.

¿Cómo se generan los contenidos con inteligencia artificial?

Ten en cuenta que se crean con algoritmos de procesamiento del lenguaje natural (PLN). Su modus operandi consiste en analizar textos previos de los que extraer datos sobre el tema para, a continuación, redactar un texto nuevo al respecto con ese contenido. Así pues, siempre parten de información preexistente y no generan otra nueva. Estos programas reciben el tema, una o dos palabras clave y algunas pautas de estilo; por ello lo habitual es trabajar con plantillas. Evidentemente, esta práctica ofrece algunas ventajas relevantes de un generador de textos con IA:
  • Es más rápido para redactar.
  • Tiene un coste más bajo que la redacción humana.
  • Genera más contenido en menos tiempo.
  • Evita el bloqueo del escritor, conocido como el «síndrome de la página en blanco».
¿Cuál es el problema, entonces? La debilidad de esta tecnología está implícita en su propia naturaleza; te lo explicamos. textos con IA

¿Por qué los textos escritos con IA no son del todo fiables? Principales inconvenientes

Existen contras importantes en los textos obtenidos de este modo. Algunos son inherentes al sistema y nunca podrán superarse, mientras que otros derivan del estado incipiente de la tecnología. Vamos a repasarlos.

Frialdad y falta de implicación

El autor de estos contenidos es una máquina sin inteligencia emocional. En consecuencia, sus creaciones carecen de matices anímicos reales. Es posible hacer que la máquina imposte un tono, pero siempre faltará el sello diferencial humano, ese estilo personal que distingue a un autor… Y los lectores suelen notar esas carencias.

Suenan robóticos

Hoy en día, estos textos tienden a resultar monótonos, en algunos casos, o erráticos en otros; sobre todo cuando son de larga extensión. Los nexos no suenan naturales y la continuidad lectora se ve afectada. Aun cuando resultan interesantes por su contenido, la lectura acaba siendo algo aburrida.

Datos desactualizados

Las bases de datos que nutren a estos sistemas de generación automática de contenidos no se actualizan en tiempo real. Hay un retraso de meses, incluso años, que les impide acceder a la información más reciente. Así, lo más nuevo siempre se queda fuera del conocimiento de la IA, y la incapacita para redactar sobre acontecimientos demasiado recientes.

Imprecisiones con autosuficiencia

Las herramientas para generar textos con IA no son perfectas. Cometen errores, incluyen informaciones inapropiadas y no suelen entender el contexto del que hablan. Por eso, con cierta frecuencia incorporan mensajes equivocados con un tono de autoridad casi incuestionable; especialmente si poseen poca información sobre el tema.

Carencias en el SEO

Los principales buscadores detestan los textos copiados y que no aportan valor. El plagio es el mayor veneno para tu posicionamiento en Google, y tanto es así que detectar textos plagiados antes de publicarlos resulta absolutamente imprescindible. ¿Tienes la seguridad de que estos textos escritos con IA no van a molestar al buscador de buscadores? Es fundamental aplicar un procedimiento estricto en este sentido antes de subirlos. Además, en general solo suelen admitir un par de keywords por tema. De ese modo el campo semántico queda fuera de tu control, arrebatándote posibilidades de posicionamiento.

La revisión humana es imprescindible para los contenidos generados con inteligencia artificial

Llegados a este punto, la conclusión es clara: los textos generados por IA no son fiables por sí solos, y estás asumiendo un grave riesgo si confías ciegamente en ellos. En ciertos casos pueden ser una ayuda y beneficiarte, ¡pero siempre han de ser supervisados, corregidos y mejorados por una persona! Sus principales inconvenientes pueden subsanarse con la revisión humana. Pero ¿qué aporta una posedición profesional a un texto redactado por inteligencia artificial? Verificar y garantizar la veracidad de los contenidos. Los localismos y los usos lingüísticos pueden afectar al contenido. Curro, pinche y coger, entre otras muchas, son palabras que van a dar problemas.
  • Comprobar el valor, la idoneidad y la actualidad de los datos incluidos. Por ejemplo, aludir en un texto sobre desempleo en España a los resultados de la última encuesta de población activa publicada.
  • Validar la adecuación de las órdenes dadas. Si nuestra información previa fue incorrecta, el contenido arrastrará esas deficiencias.
  • Reescribir los textos IA para redondear y humanizar el estilo para acercarlo y hacerlo más ameno.
  • Potenciar la eficacia SEO, incorporando palabras clave adicionales y aumentando el campo semántico.
  • Identificar el plagio e individualizar las creaciones, con ayuda de herramientas detectoras a tal efecto.
Los textos escritos con inteligencia artificial deben ser utilizados como una herramienta más a disposición de los copywriters profesionales. Desde Lowpost entendemos que la revisión profesional de los contenidos redactados por IA resulta imprescindible: en primer lugar para mejorar la calidad del resultado obtenido, y, en segundo, para identificar errores y carencias que puedan dañar tu imagen como promotor de contenidos. Puedes contar con nuestra comunidad de poseditores profesionales para asegurarte de que los contenidos generados con inteligencia artificial cuenten con calidad, veracidad y formato.